El pesimismo es un terreno plagado de engaños que muchas veces transitamos y que en ocasiones nos cautiva, nos detiene, impidiéndonos visitar otras tierras. Gracias a Dios el ser humanó tiene la capacidad de decidir, quedarse en esta tierra de las lamentaciones o seguir adelante y darle una oportunidad a la esperanza. Yo he estado ahí demasiadas veces y sé que seguramente estaré otras más, pero la experiencia me ha enseñado, que aunque este sea un estado de morbosa comodidad, la alegría puede estar un paso adelante en el camino.
@gantillano
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